Esta semana estrenó IT: Chapter 2, la secuela de la película de 2017, basada en la novela de Stephen King, la cual también tuvo una serie durante los años 90s.
La película, que está dirigida, al igual que la primera, por Andy Muschietti, narra la historia de los niños de Derry, miembros del Club de Perdedores, los cuales regresan 27 años después, con el objetivo del matar al payaso Pennywise, y así cumplir el pacto que hicieron hace casi tres décadas.
A pesar de ser mucho más sanguinaria que la entrega anterior, no logra impactar y sorprender tanto como la primera, pero sin dejar de ser una excelente película, con aspectos técnicos meticulosamente cuidados. La historia resulta ser mucho más compleja y emotiva que la primera, ya que muestra cómo enfrentan de adultos y reviven los traumas psicológicos que sufrieron cuando niños, a causa del sanguinario payaso.
En la dirección, Muschietti recurre constantemente al uso de flashbacks, en los cuales actúan los niños que protagonizaron la primera parte. Sin embargo, esto contribuye a la exagerada duración de la película (2 horas y 49 minutos). Además, utiliza el humor, una combinación un tanto sorprendente para este género, pero que ayuda, de manera excelente, a disminuir un poco la tensión que genera la escalofriante historia.
La célebre actuación de Bill Skarsgård, en su encarnación de Pennywise, incluye un tono más cómico y cínico, pero sin dejar atrás toque terrorífico y siniestro.
Por su parte, tanto la cinematografía, como la banda sonora, contribuyen a establecer y mantener la atmósfera lúgubre en que está enmarcada la historia.
Los fans del libro quedarán completamente complacidos, ya que respeta muy bien los aspectos más importantes de la versión literaria de King. También los amantes del género de terror disfrutarán grandemente esta película.