La nueva película española de Netflix, El Practicante, la cual estrenó recientemente en esta plataforma, cuenta la historia de Ángel, quien trabaja como técnico en emergencias sanitarias. Tras sufrir un grave accidente, su vida de pareja, junto a Vane, empieza a desmoronarse. Obsesionado con la idea de que ella le es infiel, su vida se convertirá en un infierno.
Una idea original de Carles Torras, quien también dirige la pieza. El guion, también a cargo de Rebeca Arnal, David Desola y Héctor Hernández Vicens, cuenta con una excelente estructura, con personajes muy bien desarrollados, mantiene al público interesado en todo momento.
Por su parte la dirección logra gran conexión con el público, para hacernos sentir gran tensión y suspenso, así como empatía con los personajes, que, de alguna manera nos lleva a vivir su drama.
Aunque todos los actores realizan una excelente interpretación de sus personajes, la actuación de Mario Casas destaca por la intensidad de su personaje y sus diversos conflictos internos y externos.
La único que no me gustó es el inesperado final, que considero le resta credibilidad y realismo.
Una excelente película, altamente recomendable.